El Príncipe Ausente
Alguna vez en un lugar lejano, donde sólo existen los finales felices, los animales cantan y las brujas malvadas son aplastadas por casas, en ese pequeño lugar existió una joven, no era princesa sin embargo se sentía como una, no era rica o poderosa pero su riqueza provenía del corazón y su poder era el ayudar a todo el que pudiera necesitar su ayuda. Sin duda a las chicas como ella no les pertenece más que un final donde se queda con un joven pueblerino y viven felices y tranquilos por siempre… O eso era lo que se pensaba.
La chica se atrevió a soñar más de lo debido, a ir a lugares más allá de los permitidos, a conocer a la nobleza y codearse con ellos sin saber que el desobedecer todas las reglas solamente alteraría su «Final Feliz» y lo volvería un tanto… caótico.
Verán… existen los príncipes y los que juegan a ser príncipes. Aquellos que sólo juegan son fáciles de reconocer, su lealtad, amor o adoración desvanecerá en cuanto alguien más se cruce en su camino, ya sea una persona, una cosa, una oportunidad o una simple ilusión. Aquellos que siempre hablaran de lo maravillosos que son, lo felices que te pueden hacer, lo mucho que mejorará tu vida con el simple hecho de ser su princesa, aquellos que sólo hablan y no actúan, aquellos que tienen el poder pero lo malgastan y aquellos que jamás pensarían en rescatarte de una torre, esos, sólo juegan a ser príncipes, les importa mucho más el beso que el ser un príncipe de verdad.
Por otro lado, los príncipes verdaderos son una verdadera delicia, y digo delicia porque ellos mejoran tus días con su simple presencia, no necesitan decirte lo afortunada que eres, te demuestran lo afortunada que eres teniendo su amor, su devoción, su lealtad. Una mirada y un largo silencio pueden decirte mil palabras sin necesidad de abrir la boca. El movimiento más preciso que pueden hacer con sus labios es darte un beso cálido y lleno de amor.
Un príncipe verdadero estará ahí incluso en la ausencia, te demostrará con pequeños detalles que su corazón lo tienes en tus manos y te pedirán que seas gentil con cada cosa que hagas ya que si algo te lastima a ti, lo lastimará a él. Te piden cautela, te piden confianza, te piden simplemente ser su princesa.
¿Y qué es una princesa? es básicamente todo lo que es un príncipe pero tal vez sumándole algún par de atributos más, bella por dentro y por fuera, sensata, siempre honesta, siempre atenta, siempre fiel, siempre ahí para ellos.
Como sea, la joven que se aventuró a conocer a la realeza también descubrió a un príncipe que nadie conocía. El príncipe ausente.
El príncipe ausente será aquel que se valga tanto de palabras huecas y vacías como aquel que juega y, de acciones y demostraciones de amor como el verdadero. Es un príncipe que esta en medio de estos dos, o más bien, es la combinación perfecta de ambos, pero existe una pequeña falla con él. Se caracteriza por siempre estar ausente.
Sus palabras te dirán que te ama, que te pertenece pero sus acciones serán a la lejanía y con alguien más, te dirá lo mucho que le importas y lo mucho que desea estar contigo pero, estará lejos con alguien más. Podrá ser tu príncipe azul, podrá ser la suma de cualidades perfectas y todo lo que podrás desear pero no estará contigo, ya sea porque le gusta la idea de tener a alguien tan leal, afectuosa y sincera a su disposición o porque sus padres ya han planeado su matrimonio con alguien más para la salvación del reino, sea como sea, nunca estará contigo, así hayan nacido para estar juntos, la realidad es que nacieron para estar juntos lejos el uno del otro.
Y así es como esta joven hizo la gran aportación al mundo, enseñándole a todos que los príncipes no sólo son 2, si no 3.
Una vez que te han roto el corazón no te puedes dar el lujo de seguir confiando en él. A final de cuentas es sólo un órgano. Siempre confía en tus instintos, serán los únicos que al final acertarán mejor al blanco que deseas, incluso más que tu tonto corazón.
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